GastroTOUR 03/11/24
Se trata de uno de los platos más reconocidos a nivel mundial por su diversidad de versiones, tan amplia como la creatividad de quienes los preparan. ¿Por qué se celebra esta efeméride y qué proponen los especialistas para disfrutarla en casa?
Cada 3 de noviembre se celebra el Día Mundial del Sándwich en honor a su creador, John Montagu, el IV Conde de Sándwich, quien ideó esta popular receta en el siglo XVIII mientras jugaba a las cartas. Pedía carne entre dos rebanadas de pan para no ensuciarse. Este sencillo bocadillo se expandió rápidamente en Europa, adaptándose al tipo de pan y costumbres culinarias de cada país. Hoy, chefs de todo el mundo lo consideran un clásico de la cocina y reinventan su fórmula con ingredientes únicos, aportándole un toque exótico y gourmet.
Esta idea ha trascendido principalmente gracias a este sencillo y práctico platillo, que rápidamente se expandió por toda Europa. En Francia e Italia, el sándwich se preparaba con pan casero de cada región, mientras que en Inglaterra adoptaron un pan de miga suave y moldeado, dando origen al conocido pan de caja o pan blanco. En España se llama "bocadillo" o, popularmente, "bocata"; de ahí nacen también los "montaditos", tapas con pan a modo de sándwich.
Algunos chefs revelan en este día sus recetas preferidas de sándwiches y explican por qué se trata de un plato tan especial en la gastronomía. El chef Facundo Kelemen comenta: “Los sándwiches pasaron de ser comida callejera a incluirse en muchos menús, incluso de fine dining”. Para él, la clave está en la simplicidad de los ingredientes, evitando combinaciones demasiado “exóticas”. “El ejemplo perfecto y mi sándwich preferido es el de pastrami, que se sirve en pan de centeno con un poco de mostaza”.
Kelemen, quien trabaja en Mengano, también detalló una de sus versiones favoritas de sándwich: una versión de tapa de asado de Wagyu. “Es tapa de asado de Wagyu cocinada al vacío por 10 horas. Luego se porciona, se apana y se fríe”, explicó. Este sándwich se sirve entre dos panes caseros de molde dorados en manteca, acompañados de una salsa elaborada con tomate, reducción del jugo de cocción de la carne, soja, azúcar y mostaza Dijon.
Por su parte, el chef Edgar Kuda, reconocido también por su trayectoria como sushiman, incluyó a los sándwiches en su repertorio gastronómico. En diálogo con Infobae, reflexionó: “La inclusión de los sándwiches en Japón se remonta a finales del siglo XIX y principios del XX, cuando Japón se abre al comercio con Occidente. Es entonces cuando los sándwiches ingresan al país”.
“Como es característico de la cultura japonesa, al recibir influencias externas, Japón mejora o personaliza los productos. Así, el sándwich se convierte en un producto que, aunque adopta un formato occidental, se transforma en algo propio de la época de finales del siglo XIX y principios del XX. Es una representación de la cocina moderna japonesa, que implica la japonización de elementos occidentales”, agregó Kuda, impulsor de diversos proyectos como San Café, Kudasushi, Kudaramen, Yuzu Izakaya, Yuzu y Oki by Kuda.
Kuda también compartió su idea de “sando”, un sándwich que utiliza pan de molde estilo Shokupan: “Este sando lleva dos rodajas de Shokupan o puede ser un pan de molde tradicional”. La receta incluye huevos duros, pickles de nabo, cebolla de verdeo, palta, mayonesa, sal y pimienta.
Receta para el Pan Bao:
1500 gramos de harina 0000.
30 gramos de sal.
50 mililitros de aceite.
40 gramos de levadura.
800 mililitros de agua.
100 gramos de azúcar.
Para la panceta: 300 gramos de panceta braseada a fuego medio durante una hora y media. Mezcla de partes iguales de pimentón dulce, pimentón ahumado y sal.
Preparar el pan bao amasando todos los ingredientes y dejando reposar la masa hasta que duplique su tamaño. Formar los panes y cocinarlos al vapor. Bañar la panceta con salsa tonkatsu y colocarla en el pan bao. Completar el sándwich con cebolla morada, pickles de pepino, alioli, cilantro y maní.
Otro chef consultado por Infobae fue Diego Colman. “Los sándwiches en la gastronomía representan un plato fácil de hacer en cualquier hogar, porque con dos rebanadas de pan de cualquier estilo podés lograr algo muy rico con lo que tengas o lo que te guste. Es más, a todos nos gustan tanto los salados como los dulces. No creo que nadie se resista a un buen sándwich”, dijo.
“Para una receta diferente, haría un sándwich con rebanadas de pan blanco de molde tipo lactal, pero casero. Tostarlas y untarlas con queso crema, rúcula, aceite de oliva, pimienta en grano, morrón asado, y a eso sumarle una lonja de carne braseada”, recomendó Colman, quien comparte sus recetas en El Retorno.
Sándwich de milanesa con papas al horno:
Pan de preferencia (de corteza suave para morder más cómodamente).
Dos churrascos de peceto (o el corte que prefieras) de aproximadamente 1 cm de grosor.
Ralladura de medio limón.
Un huevo.
Una cucharada de mostaza.
Un diente de ajo picado.
Un puñado de perejil picado.
Una papa grande o dos medianas.
Pan rallado a gusto.
Sal a gusto.
Marinar en seco los churrascos de peceto con ralladura de limón, ajo y perejil por ambos lados. Dejar reposar por media hora en la heladera. Luego, preparar la mezcla con el huevo, mostaza, sal y pimienta. Mezclar hasta integrar. Salar hasta que la mezcla recuerde al agua de mar para obtener la cantidad perfecta de sal, según el chef.
Pasar el peceto por la mezcla de huevo y apanar por todos lados dándole golpecitos para que quede bien adherido. Colocarlo en una placa y llevarlo a la heladera por 24 horas: “Esto hará que el pan quede bien adherido y no se despegue; si el hambre apremia, también puede estar de dos a tres horas en el freezer”, dijo el chef.
Con estas dos recetas distintas a la tradicional de jamón y queso, hoy es el día ideal para inventarse y disfrutar de un sándwich o bocadillo... ¡Buen provecho!
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